No nos afanemos por el futuro, busquemos el Reino de Dios y Su justicia, sabiendo que no dependemos del sistema del mundo sino del Rey de reyes y Señor de señores. ¡Él abre todas las puertas cerradas!.
No nos afanemos por el futuro, busquemos el Reino de Dios y Su justicia, sabiendo que no dependemos del sistema del mundo sino del Rey de reyes y Señor de señores. ¡Él abre todas las puertas cerradas!.